Categoría: Tecnología

Presentación de una esfera que vuela desarrollada por el Ministerio de Defensa japonés. Todavía es un prototipo, puede despegar y aterrizar cualquier posición y alcanzar velocidades de hasta 60km/h.

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El nuevo superordenador de Fujitsu que ya está en funcionamiento en uno del los laboratorios del instituto Riken en Kobe es el más rápido del mundo. En el 2004 Japón perdió la primera posición en el TOP500 de ordenadores más rápidos, y ayer la volvió a recuperar oficialmente. El Fujistsu K es tres veces más rápido que el segundo de la lista (China).

Es el primer ordenador de la historia en superar los 8 petaflops y todo el sistema tiene 548,352 cores. La factura de la luz y manutención en general del superordenador será de cerca de 8 millones de euros al año.

Fuente: Nikkei

Visto en una tienda recóndita en Akihabara.

A finales de los años 70 las zonas urbanas de Kawasaki, Yokohama y Tokio sufrieron grandes problemas de polución debido a la rápida industrialización del país. Desde entonces son muchas las medidas que ha ido tomando el gobierno para controlar las emisiones de la tercera economía del mundo.

Por parte del gobierno, durante los dos últimos años, ha creado varios fondos verdes para promover tecnologías que reduzcan las emisiones y que a la vez ayuden a industrias de diversos sectores a salir de la crisis. Algunas de las medidas, han sido tan originales como animar a los japoneses a no vestir con corbata en verano, siendo el primer ministro japonés el primero en adoptar la medida apareciendo en actos oficiales sin corbata. Teóricamente se ahorra energía porque la corbata da calor y se tiende a poner el aire acondicionado a menor temperatura. La medida, considerada por muchos como absurda ha resultado ser muy efectiva, al menos para concienciar a los japoneses de que es importante no desperdiciar energía incluso en minucias como la temperatura del aire acondicionado.

Un ejemplo más serio, son los subsidios de entre 2.000 y 3.000 euros que animan a los ciudadanos a cambiar sus coches de más de 10 años por coches híbridos o eléctricos. Dos de los coches eléctricos que más se están vendiendo en Japón son el Mitsubishi i-MiEV y el Nissan LEAF. Son coches urbanos capaces de recorrer más de 150 kilómetros sin recargar. Se pueden recargar en casa enchufándolos a la red eléctrica pero el gobierno metropolitano de Tokio y Yokohama están ayudando a desarrollar infraestructura para instalar cargadores en gasolineras. Ya hay 200 gasolineras en Tokio y Yokohama que permiten recargar coches eléctricos. Para finales de año planean tener instalados más de 500 puntos de recarga en el área metropolitana de Tokio. Para los usuarios, el coste por kilómetro es menor que con coches de gasolina. Si hasta ahora Japón ha liderado la revolución de los coches híbridos, este año será recordado como el inicio de la producción en masa de coches eléctricos. Por ahora se están empezando a ver por las calles de Tokio, todavía no está planeada su exportación.

El Mitsubishi i-MiEV es uno de los coches eléctricos más populares en Japón.

Por parte de las empresas, están casi todas aprovechando también las ayudas del gobierno y centrándose en crear productos que reduzcan las emisiones. Por ejemplo, todas las grandes de la electrónica ya están vendiendo televisiones con retroiluminación LED. También las bombillas en las casas japonesas están pasando progresivamente a ser LED. Panasonic, además de ofrecer productos concretos para reducir las emisiones, también ofrece soluciones integrales de emisión 0 para casas unifamiliares. La “eco-casa” de Panasonic funciona con energía eólica y solar, las paredes retienen calor en invierno y no dejan entrar el calor en verano, todos los electrodomésticos de la casa son de bajo consumo. Según Panasonic, una familia de cuatro personas puede vivir sin necesidad de conectar la casa a la red eléctrica convencional.

Japón es el mayor productor de células solares. Las japonesas Sharp y Kyocera tienen fábricas por todo el mundo produciendo los componentes fundamentales para construir centrales solares. En cuanto a la potencia solar instalada en Japón, hasta hace poco se consideraba un país algo retrasado hasta este año en el que ha llegado por fin a los 5.000 megavatios. Hasta ahora la mayoría de la energía renovable en las grandes ciudades japonesas era producida en incineradoras de basura, algo no muy bien visto por la comunidad internacional.

El país en el que se firmó el protocolo de Kioto, un país con muy pocos recursos naturales, que importa materia prima y exporta tecnología, afronta muchos retos para reducir sus emisiones durante los próximos años. Son muchos los esfuerzos, tanto por parte el gobierno con varios estímulos económicos de varios centenares de miles de millones de euros destinados exclusivamente al desarrollo y ejecución de tecnologías verdes, como por parte de las empresas que lo ven cada vez más como una oportunidad para renovar todos sus productos y reactivar el consumo.

Laboratorios de todo el mundo que están trabajando en transmisión de electricidad a distancia desde hace muchos años y cada vez las expectativas son más prometedoras. Cada vez han menos cables en nuestra vida diaria pero todavía necesitamos conectar nuestros gadgets y electrodomésticos a la red eléctrica La llegada de productos que terminarán de eliminar los cables de nuestras vidas está a punto de llegar, el primer paso será la recarga de teléfonos móviles y ordenadores portátiles a distancia, sin necesidad de conectarlos a la red.

Últimamente, uno de los grandes problemas en el desarrollo de nuevas tecnologías son las baterías, los dispositivos cada vez consumen más pero las baterías no mejoran al ritmo suficiente y como consecuencia los usuarios nos vemos más limitados teniendo que recargar nuestros móviles incluso varias veces al día. ¿Qué pasaría si no nos tuviéramos que preocupar por conectar nuestros gadgets a ningún cable para que se recargaran?

Inducción electromagnética y resonancia magnética son los dos métodos que más se están usando en los laboratorios. Las soluciones basadas en inducción magnética funcionan bien sólo a muy cortas distancias y el dispositivo que transmite y el que recibe potencia eléctrica tienen que estar alineados de una determinada forma. Prototipos basadas en inducción han funcionado bien en entornos controlados en laboratorios pero todavía no se han creado prototipos que puedan llegar a convertirse en productos comerciales en un futuro próximo.

En los laboratorios de Fujitsu en la ciudad industrial de Kawasaki, ciudad colindante a Tokio, apostaron desde hace tiempo por seguir el camino de la resonancia magnética en vez de la inducción magnética. Sus esfuerzos han dado los primeros frutos la semana pasada, cuando Fujitsu fue la primera empresa en presentar un prototipo funcional de batería de teléfono móvil que se recarga a distancia en cualquier posición y estando incluso a varios metros de distancia del dispositivo emisor. Además, lo han diseñado de forma que se pueden cargar varios dispositivos a la vez sin que haya interferencias entre la recarga de unos y otros.

Los primeros prototipos de Fujitsu cuyo funcionamiento se ha mostrado al público por primera vez en una conferencia de Ingeniería Electrónica en Osaka, funcionan con un emisor de diseño compacto (15x10cm) y es capaz de recargar hasta tres teléfonos móviles dentro de un rango de 3 metros de distancia con una eficiencia del 85%. Son tan sólo prototipos pero en Fujitsu son optimistas y planean lanzar los primeros productos basados en esta tecnología a principios del año que viene, siendo los primeros en el mundo en hacerlo. Todavía no han hecho publico el coste exacto de los emisores y las baterías pero dicen que estarán al alcance del bolsillo de casi todos.

Todavía queda mucho camino por recorrer pero en Fujitsu son ambiciosos y en el futuro planean instalar puntos de recarga en la vía pública que permitirían a los viandantes poder recargar sus móviles, cámaras de fotos, ordenadores e incluso coches eléctricos en prácticamente cualquier lugar sin necesidad de cables. Todo apunta a que nos espera un futuro sin cables.

Fuente: Fujitsu

Dentsu Facility Management Inc ha empezado a vender una máquina que es capaz de producir unas 60 lechugas al día sin necesidad de luz solar. Por ahora solo se venden en Japón, los primeros clientes están siendo cadenas de restaurantes y cuesta la friolera de 75.000 Euros. ¿Tendremos algún día neveras, o mejor, llamémoslas «robohuertas», capaces de producir lechugas en casa?

Las fotos de esta máquina de lechugas me recuerdan a las instalaciones de la granja artificial que está bajo la estación de Tokio.

Vía Greendiary