Pues si, una de las cosas que llaman la atención al darse un paseo por Japón es la poca cantidad de gente con sobrepeso que hay. Y es que los japoneses son de la filosofía de comer bien pero con moderación, disfrutan comiendo, disfrutan cocinando, disfrutan los sabores. Los Japoneses consumen como media unas 2.900 calorías al día, los Europeos 3.500 calorías y los Estado Unidenses 3.800 calorías.
Una de las claves de la dieta japonesa es que comen muy poca carne en comparación a lo que estamos acostumbrados en occidente. La dieta japonesa se basa en el arroz, pescado, verduras y compuestos de soja como por ejemplo el tofu. Digamos que te puedes hinchar a comer y no engordar. Por ejemplo, durante mi año vulcanus perdí cinco kilos y eso que me esforzaba por comer mucho, en mi empresa me gané fama de comilón. Al volver a España volví a recuperar los cinco kilos y ahora estoy en proceso de pérdida otra vez. Por mucho arroz blanco, soba, pescado que coma no engordo.
Además los japoneses no son muy aficionados a los dulces. Los comen pero con mucha moderación, de hecho a veces cuando algo está demasiado dulce, lo rechazan diciendo «Amaaaai!!» (Dulce!!!!). Que sería el equivalente a cuando nosotros decimos «Arghhh como pica esto!». Pero resulta curioso que ellos lo usen para las cosas demasiado dulces para las que yo no tengo ningún problema.
Otra cosa curiosa es que un Japonés que para nosotros puede parecer «normal» a ojos de otro Japonés quizás pueda ser juzgado como alguien con problemas de sobrepeso. Digamos que los estándares de belleza son diferentes y la verdad es que se agradece a la vista.