Motoi Yamamoto es un artista japonés que utiliza sal como elemento principal para construir sus obras. En Asia la sal es un símbolo de purificación, por ejemplo, en Japón se suelen poner platitos con sal en la entrada de restaurantes para protegerlos contra malos espíritus. También es utilizado en rituales shintoístas y antes de empezar combates de sumo para purificar.
Una de las cosas más interesantes que hace Motoi Yamamoto son laberintos super-intrincados usando sólo sal. Es impresionante la paciencia, dedicación y atención al detalle que tiene.
En estos vídeos se puede ver el proceso que sigue Motoi Yamamoto para crear sus laberintos de sal.
Gunkanjima es un islote en la prefectura de Nagasaki. La isla entera fue comprada por Mitsubishi en 1890 porque encontrarno carbón bajo el mar en esa zona. Gunkanjima (軍艦島) se podría traducir como «isla acorazado», tiene este nombre porque la forma de la isla recuerda a un barco acorazado.
Fue poblada inicialmente por apenas unos miles de obreros, pero con el tiempo su censo fue creciendo hasta convertirse en el lugar con mayor densidad de población del mundo. En 1959 llegó a tener 85.500 habitantes por km cuadrado en toda la isla y más de 130.000 habitantes por km cuadrado en la zona más densa de la isla, lo que supone una de las mayores densidades de población jamás registradas en la historia de la humanidad. En la isla se construyeron bloques de apartamentos, cines, salones recreativos, casinos, piscinas, supermercados…
En 1974 el carbón se terminó y Mitsubishi anunció oficialmente el cierre de la mina. Hoy en día es una isla fantasma, nadie ha vivido en ella desde el 1975. ¡Pasó de ser la zona con más densidad de población del mundo a no estar habitada!
En el año 2002 Mitsubishi decidió donar la isla a la ciudad de Nagasaki y desde el 2009 ciertas partes de la isla se pueden visitar (Antes el acceso estaba restringidoa historiadores y periodistas). Cuesta 4500 yenes el billete de ida y vuelta en ferry desde el puerto de Nagasaki. ¡Estoy deseando ir a Kyushu, donde todavía no he estado nunca, visitar Gunkanjima y grabar un video como el que hicimos en un hospital abandonado en Tokyo!
En Japón a veces construyen casas y edificios ridículamente estrechos. Una de las razones por las que se da este extraño fenómeno es que las leyes permiten parcelar el terreno con mucha libertad con lo que a veces un propietario puede terminar teniendo un terreno de 3×20 metros en centro de Tokyo o incluso 2×30 metros… Creo que en en la mayoría de los países europeos las leyes son más estrictas y hay definidos unos tamaños mínimos a partir de los cuales no se pueden hacer más divisiones del terreno. En este vídeo presentan el caso de una casa 1 metro y 70 cm de ancho y 14 metros de largo. ¿Podríais vivir en una casa así?
Juergen Specht, un fotógrafo del que hablé en mi blog de fotografía se encontró con esta torre en las afueras de Osaka. ¡Parece pequeñaja pero tiene 180 metros de altura! Parece ser que se llama «PL Peace Tower» y es la torre-iglesia principal de una secta llamada «Perfect Liberty» (Libertad Perfecta). El objetivo de esta secta, según su fundador japonés, es conseguir la paz mundial.
La torre, la construyeron en 1970 y está dedicada a la memoria de todas las personas que han muerto en guerras en toda la historia de la humanidad. Según lo que cuenta Juergen Specht en su blog, la torre está construida de forma que aunque fuera afectada por un gran terremoto podría torcerse hasta 45 grados sin derrumbarse.
Al terminar la segunda guerra mundial el 98% de los edificios y casas de Tokio habían sido destruidos. Durante la reconstrucción del país varios arquitectos pensaron que el futuro de la arquitectura debería ser lo más “modular” posible, formaban parte del movimiento metabólico. Estos arquitectos, preocupados ante un futuro de sociedades pensaron que se viviría mejor si las estructuras arquitectónicas fueran flexibles y extensibles, si pudieran crecer como si fuera un organismo vivo a partir de módulos. Uno de los arquitectos metabolistas más importantes de la post-guerra fue Kisho Kurokawa. Él concibió el primer edificio modular: la torre de cápsulas Nakagin situada en Shinbashi, Tokio.
El edificio está constituido por dos grandes columnas que forman el núcleo. A este núcleo se le añadieron 140 cápsulas prefabricadas, cada una de ellas unida a una de las dos columnas con cuatro grandes tornillos. Las cápsulas pueden ser reemplazadas por otras nuevas con el paso del tiempo. Las cápsulas son construidas en una fábrica. Las cápsulas actuales tienen una televisión, un cuarto de baño, una mini cocina, una cama, dos armarios empotrados e incluso una calculadora.
Uno de los primeros diseños de las cápsulas que están instaladas en la actualidad.
Después de casi 40 años la torre Nakagin sigue en pie pero parece que el sistema de reemplazo de cápsulas no es tan sencillo como se pensó en un principio y el edificio se está haciendo viejo. Los habitantes de la torre han decidido demolerla para construir una torre de oficinas tradicional, algo a lo que la comunidad de arquitectos internacional se ha opuesto. Muchos de ellos lo consideran como un exponente de valor histórico de lo que podrían haber sido nuestras ciudades de hoy en día pero que nunca lo fue. Es un recordatorio de los caminos que no se tomaron, de que hubo posibilidades para diseñar mundos diferentes al que vivimos hoy en día.
Foto de Tomio Ohashi.
Foto de Tomio Ohashi.
Foto de Tomio Ohashi.
Foto de Tomio Ohashi.
Vídeo que muestra el interior de las cápsulas con explicaciones del arquitecto Kisho Kurokawa.
Desde que vivo en Japón una de mis nuevas preocupaciones en la vida son los terremotos. Siempre me he preguntado si por lo general los edificios y casas aquí están realmente preparados para aguantar un gran terremoto. La verdad es que después de mucho preguntar e informarme la realidad es que la mayoría de las construcciones aguantarían menos de lo que cabría esperar. En el año 1981 la ley cambió y todo edificio o casa construida después de ese año se supone que es más segura ante temblores sísmicos, en el 2007 volvió a cambiar la ley y la han hecho aún más estricta. Aún así, todo el mundo tiene miedo de que haya un terremoto gordo con epicentro en una zona muy habitada.
Si venís a vivir a Japón cuanto más nueva sea la casa mejor que mejor, al menos que sea de después del 81. Los terremotos son una de las razones (Entre otras muchas) por las que el valor de las casas en Japón baja con el tiempo.
Una casa en construcción con un sistema especial en las paredes para aguantar temblores fuertes.
Abajo a la izquierda se puede ver cómo es el interior de las paredes. Tienen una especie de «sistema tijera móvil» integrado dentro de cada una de las paredes de la casa.