Los fines de semana hay que aprovecharlos, así que fuimos al famoso parque de Ueno donde hay varios templos y montones de museos. El parque Ueno es el más famoso de Japón, lo visitan miles de personas cada día, sobre todo en primavera durante el florecimiento de los cerezos.
Monje a la entrada del parque
Estuvimos visitando varios templos, todos ellos bastante pequeños.
Típico jardín japonés
Luego marchamos al Museo Nacional de Tokyo (Visita obligada). La entrada con el carnet de estudiantes nos costó solo 130 Yenes. El museo es enorme y tiene varios edificios con arte asiático, arte chino y el edificio principal con la mayor colección de material histórico japonés del mundo. Nosotros estuvimos tres horas en el edificio japonés.
Una de las secciones más interesantes es la de armas samurais. Es impresionante ver como las Katanas de hace mil años se conservan perfectamente. No pude hacer casi fotos, pero aquí tenéis la Katana más valiosa que existe. Fue forjada en el siglo XI por el gran maestro SANJO Munechika.
Katana de SANJO Munechika. Fijaros que solo está la hoja de la Katana, había otra sección solo con mangos, fundas y adornos para katanas.
También había armaduras samurais, estatuas, cuadros, escrituras tradicionales japonesas, U-yioke etc. Salimos del parque (Comer dentro del parque es bastante caro) y buscamos un sitio de ramen para comer. El ramen es como una especie de sopa con fideos, verduras y carne. Hay dos tipos de fideos que se pueden escoger: Soba y Udon. Los Soba son más finitos que los Udon. Si pedís ramen en un restaurante os pregutarán si queréis con Soba o Udon.
Por la tarde marchamos caminando hacia Asakusa, el barrio más tradicional de Tokyo. Allí nos metimos de lleno en el famoso mercadillo de Asakusa.
Mercadillo tradicional de Asakusa.
Había tiendas de todo tipo de chucherías típicas japonesas: katanas, monigotes de maneki-neko, abanicos, ropa… Al final de la calle principal del mercadillo se encuentra el templo de Asakusa, el más bonito de Tokyo. El templo fue construido por el fundador de Tokyo en el siglo VII, pero fue derribado por los americanos en la segunda guerra mundial. Lo que se ve hoy en día es una reconstrucción del antiguo templo.
Templo de Asakusa
Nada más entrar en el edificio principal si miráis al techo veréis al dragón de Dragon Ball con una de las bolas en una garra.
A continuación fuimos a Ginza. El barrio «pijo» de Tokyo, donde están todas las tiendas más caras y va toda la gente muy bien vestida. La primera impresión de Ginza es que está todo muy muy limpio, las calles impecables, y la gente va vestida a la última moda. Nosotros con pantalón corto y sandalias de verano parecíamos unos mendigos por allí 😉
La famosa tienda de Apple en Ginza.
Visitamos la famosa tienda de Apple en Ginza. Tiene 4 plantas, en la primera todo son IPods y portátiles, en la segunda hay como un cibercafé, en la tercera hay una sala de conferencias donde te explican cosas y te intentan vender sus productos, y en la última puedes jugar y comprar más IPods. Mmmm, concluyendo: un edificio solo para vender IPods. Eso sí, la cola para pagar era bastante larga, se venden los IPods como churros.
Friki echando la partida en la tienda de Apple
Luego fuimos al edificio de Sony, mucho más grande pero con el mismo estilo: en plan exposición/museo. Vi los últimos Aibos y aparatejos de Sony: reproductor de películas portátil, el librié para leer libros electrónicos, portátiles Vaio etc.
Aibos en el edificio de Sony.
Y para terminar el día un poco de Sushi en Shinjuku y a casa. La ruta que he descrito es muy buena si solo tenéis un día para visitar Tokyo, solo faltaría visitar Shibuya y el mercado del pescado. Es un poco cansado para un solo día pero se puede hacer.