Junto con El juego de Ender era un libro que tenía pendiente. Me ha gustando mucho aunque como me lo había puesto por las nubes me he quedado con ganas de más. Es un libro sobre lo absurdo de todo lo que nos rodea, sobre lo efímeros que somos, sobre lo insignificante que es nuestra existencia, sobre lo importante que puede llegar a ser algo insignificante, sobre la casualidad que somos y que al fin y al cabo no deberíamos tomarnos la vida tan en serio.
Me gusta el tono de humor del libro que se combina con una lectura entrelíneas para ir captando los mensajes sutiles que nos está transmitiendo el autor, una mezcla de humor, filosofía, ciencia ficción y grandes dosis de imaginación. Recopilo a continuación algunos párrafos que me han gustado especialmente:
Con ese fin construyeron un ordenador estupendo que era tan sumamente inteligente, que incluso antes de que se conectaran sus bancos de datos empezó por Pienso, luego existo, y llegó hasta inferir la existencia del pudín de arroz y del impuesto sobre la renta antes de que alguien lograra desconectarlo.
Desde luego este ordenador superaría el Test de Turing tranquilamente.
-¿Y acaso no eres – le dijo Fook, inclinándose ansiosamente hacia delante- mejor analista que el Pensador de la estrella Googleplex en la Séptima Galaxia de la Luz y del Ingenio, que puede calcular la trayectoria de cada partícula de polvo de una tormenta de arena de cinco semanas de Dangrabad Beta?
-¿Una tormenta de arena de cinco semanas? – dijo altivamente Pensamiento Profundo – ¿Y me preguntas eso a mí, que he examinado hasta los vectores de los átomos de la Gran Explosión? No me molestéis con cosas de calculadora de bolsillo.
Aquí me llamó la atención el uso de la palabra Googleplex para nombre a la estrella, un Googleplex es un número enorme equivalente a :10^[(10)^100]. Y también es el nombre de las oficinas centrales de Google.
-Sí – repondió Pensamiento Profundo- A la Vida, al Universo y a Todo.Hay una respuesta. Pero – añadió- tengo que pensarla.
-Nunca más – gritó el hombre-, nunca más volveremos a levantarnos por la mañana preguntándonos: ¿quién soy? ¿Qué sentido tiene mi vida? ¿Tiene alguna importancia, cósmicamente hablando, si no me levanto para ir a trabajar? ¡Porque hoy, finalmente, conoceremos, de una vez por todas, la lisa y llana respuesta a todos esos problemillas inoportunos de la Vida, del Universo y de Todo.
Si queréis saber la respuesta a Todo, a nuestra existencia leed el libro 😉 Y la próxima vez que lleguéis tarde al curro decid «Tiene alguna importancia cósmicamente hablando…»
-Sí -dijo el anciano, haciendo una pausa para mirar desalentado por la habitación- Diez millones de años de planificación y de trabajo echados a perder como si nada. Diez millones de años, terrícula… ¿Te imaginas un período de tiempo semejante? En ese tiempo, una civilización galáctica podría desarrollarse cinco veces a partir de un simple gusano. Echados a perder.
-Bueno, yo digo que sí al idealismo, sí a la dignidad de la investigación pura, sí a la búsqueda de la verdad en todas sus formas, pero me temo que se llega a un punto en que se empieza a sospechar que existe una verdad auténtica, es que toda la infinitud multidimensional del Universo está regida, casi sin lugar a dudas, por un hatajo de locos. Y si hay que elegir entre pasarse otros diez millones de años averiguándolo, y coger el dinero y salir corriendo, a mí me vendría bien hacer ejercicio.
Sería un libro que le gustaría leer a Feynman si estuviera vivo. Feynman solía decir «¡No os preocupéis, al fin y al cabo todo es una broma!, digamos que es el espíritu que según me punto de vista nos transmite «Guía del autoestopista galáctico».