Continuamos con la serie de artículos sobre Beijing:
Salimos de buena mañana hacia la ciudad prohibida, donde vivía el emperador hasta el siglo pasado.
Saliendo del hotel.
El hombre este estaba todas las mañanas en la misma esquina. El último día recibió un regalito de parte de Julien.
Después de seguir el procedimiento: paseito por calles llenas de casas destartaladas hasta conseguir un taxi, «hablar» con el taxista hasta conseguir que entienda donde queremos ir llegamos a la entrada principal de la ciudad prohibida.
Entrada a la ciudad prohibida.
Una vez dentro lo que más impresiona es la inmensidad del recinto: jardines, templos, murallas, casas. Digamos que el emperador tenía espacio para entrenerse, aunque según la película El último emperador el emperador lo único que quería era poder salir de allí. Por cierto, os recomiendo la película El último emperador, si queréis aprender un poco más sobre la historia del final del poder imperial en China. Además, muchas de las secuencias de la película están grabadas en la ciudad prohibida, con lo que si venís por Beijing recordaréis muchas de las escenas de la película.
A mí personalmente una de las cosas que más me gusta cuando visito monumentos es buscar los pequeños detalles. Aquí tenéis algunas de las fotos que saqué. Fijaos que algunas fotos os recordarán ciertas series de ánime famosas como por ejemplo Dragon Ball.
Los dragones de la última foto forman parte de un muro donde hay 9 dragones, el dragón central representa la figura del emperador y los demás son guardianes protectores. Fijaos también que cada dragón tiene una bola.
El típico león que solemos ver en los restaurantes chinos/hispánicos.
De izquiera a derecha: Carlos, Albert y Julien.
Es el altar que sale al final de El último emperador.
Pasamos casi todo el día dentro de la ciudad prohibida, está llena de pequeños rincones, museos, templos, jardines etc. Al final del día subimos a una pequeña montaña que hay al fondo para ver una panorámica de la ciudad perdida.
Si queréis ver más fotos este es mi tag de Beijing en Flickr.
Actualización: Dem nos sugiere usar Google Maps para poder hacernos una idea de las dimensiones de esta construcción.