Mañana marcho hacía Japón, me espera un largo viaje. Desde Alicante iré por Madrid hasta Bruselas, allí en Bruselas estaré hasta el martes cuando cogeremos el avión hacia Tokyo pasando por Frankfurt. Llegaré al aeropuerto de Narita en Tokyo el miércoles a las 8 de la mañana.
Allí en Tokyo tendré que buscar mi nueva casa que se encuentra en T 167-0051 3-31-14 Ogikubo Suginami-ku TOKYO. Vaya direcciones intuitivas que tienen, allí no ponen nombres a las calles, todo va con números y parece ser que incluso los taxistas muchas veces no se aclaran por Tokyo. Recordemos que la zona de Tokyo y Yokohama está considerada como la zona urbana más grande del mundo y con más número de habitantes, más de 30 millones, casi como toda la población española.
Por cierto, para aquellos quieran ir a Japón, podéis pedir la beca Vulcanus que es la que estoy disfrutando yo actualmente.
Adiós a todos esos lectores que conozco en persona y no podré volver a ver hasta dentro de un año 🙁
Ya sabéis que en cuanto consiga conectarme a Internet desde cualquier lugar apareceré por el blog comentándo las últimas jugadas ;).
Comienza la aventura chavales. Y para terminar, un poco de filosofía oriental:
Se cuenta que en el siglo pasado, un turista europeo fue a un templo budista en Japón, con la finalidad de visitar a un famoso sabio.
El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuartito muy simple y lleno de libros.Las únicas piezas de mobiliario eran un futón, una mesa y un banco.
– ¿Dónde están sus muebles? – preguntó el turista.
Y el sabio, rápidamente, también preguntó: – ¿Y dónde están los suyos…?
– ¿Los míos? – se sorprendió el turista.
¡Pero si yo estoy aquí solamente de paso! – Yo también… – concluyó el sabio.
«La vida en la tierra es solamente temporal. Sin embargo, algunos viven como si fueran a quedarse aquí Eternamente y se olvidan de ser felices».
«El valor de las cosas no está en el tiempo que duran, sino en la INTENSIDAD con que suceden….. por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables como vosotros.»Huang Shi Quang